¿Cómo es trabajar en la moda peruana?
Problemáticas, beneficios percibidos y un balance de ambas
Liderar una plataforma digital que habla de moda peruana, un sector sumamente informal y precarizado, implica que muchas veces nos lleguen testimonios y denuncias de malas prácticas. Pero más que compartir estas situaciones y esperar que en un futuro dejen de ser tan frecuentes, decidimos mapear si estos casos son aislados o si son parte de un patrón dentro de la moda peruana.
Es así, que a mediados de este año estuvimos difundiendo la encuesta “¿Cómo es chambear1 en la moda peruana?”, orientado a ser respondido por personas que hayan trabajado o trabajen actualmente en las diversas áreas que componen la moda peruana. La encuesta tenía el objetivo de identificar problemáticas y beneficios percibidos por lxs participantes durante su trabajo en el rubro.
Después de 4 meses de circulación por nuestras historias de Instagram y de colegas, obtuvimos las respuestas de 44 trabajadorxs de la moda peruana. A continuación se presentarán los hallazgos más resaltantes.
Perfil de lxs encuestadxs
Entre las diversas opciones de áreas de trabajo dentro de la moda, se puede observar que lxs encuestadxs vienen de diferentes profesiones. Sin embargo, en su mayoría, con un 28%, trabajan en el área de diseño y confecciones de una marca o empresa peruana de moda. Un segundo grupo mayoritario entre lxs encuestadxs corresponde a aquellxs que trabajan o trabajaron en la creación de contenido de moda en redes sociales (Tik Tok o Instagram). Finalmente, podemos recoger también un grupo significativo de personas que trabajan en áreas administrativa (branding, ventas, comercial), en styling y en dirección de arte.
En cuanto a las edades, casi la mitad (43,5% de lxs encuestadxs totales) se encuentra entre los 25 y 30 años. Sin embargo, también encontramos un grupo importante de personas más jóvenes de entre 20 y 24 años (correspondiente al 32,6%). Este último grupo es importante pues serían quienes están teniendo sus primeras experiencias laborales en la moda peruana.
Finalmente es relevante tener en cuenta el tiempo que han venido o vienen trabajando dentro de la moda peruana. Así, el 43,2% de encuestadxs ha trabajado entre 3 a 5 años en el rubro, por lo cual se entiende que las impresiones que compartan son resultado de una experiencia sostenida en la moda peruana.
Problemáticas y beneficios percibidos
Para determinar las principales problemáticas que existen en la moda peruana, se propuso en la encuesta 6 categorías:
Explotación / no respeto a las horas de trabajo
Remuneración muy baja para las responsabilidades que se asume
Mal trato: hostigamiento, desgaste emocional y/o físico, etc.
Impuntualidad en los pagos
Incoherencia entre lo que dicen y hacen en la marca/empresa
Otro
Estas 6 categorías se construyen en base a los testimonios que hemos recibido en 6 años de existencia como plataforma digital. Asimismo, cabe resaltar que las categorías incluyen la opción “Otro” en caso hubiera alguna problemática diferente a las propuestas, o que lx encuestadx considera que no se alinea con estas.
De acuerdo a lo respondido, la principal problemática encontrada en la moda peruana, como trabajadorx del rubro, es la baja remuneración de acuerdo a las responsabilidades asignadas al puesto. Sobre esto, y como parte de los testimonios que lxs encuestadxs podían compartir en la encuesta, unx de ellxs menciona su experiencia:
Como se observa, al hablar de remuneración baja para las responsabilidades asumidas en el puesto, se entiende que estos implican usualmente realizar actividades que están fuera del área profesional de la persona contratada. Este es un caso que se presenta con frecuencia en la moda peruana, de acuerdo a lo recogido en la encuesta.
El segundo problema encontrado en la experiencia laboral dentro de la moda peruana es la explotación o no respeto de las horas de trabajo.
Estos dos testimonios ilustran muy bien los casos que se asocian a la explotación y al no respeto de las horas laborales, que por ley se deben cumplir. Lo lamentable en ambos casos es observar cómo estas prácticas de explotación se vinculan con tratos poco éticos por parte de supervisorxs o dueñxs de la marca, resultando en lo que podría parecer acciones revanchistas.
Por otro lado, también se recogieron las impresiones en torno a los beneficios que tendría el trabajo en la moda peruana.
Dos aspectos resaltados por la mayoría de participantes como beneficios de trabajar en la moda peruana, es el aprendizaje profesional (38,6%) y las oportunidades de conocer contactos (37,3%).
Si bien los testimonios asociados a los puntos positivos de la moda peruana son escasos (solo se pudo recoger el que se ha mostrado arriba), la importancia asociada a la red de contactos es esperable debido a que el rubro de la moda en Lima es muy hermético, por tanto los contactos que se puedan construir estando dentro es clave para poder desenvolverse y crecer profesionalmente. Por su lado, el nivel de aprendizaje percibido puede interpretarse, en parte, como consecuencia del estar desenvolviéndose en puestos laborales con muchas y diferentes funciones. Esto podría resultar en que lxs trabajadorxs desarrollen, voluntariamente o no, habilidades para diferentes actividades, así como mayor conocimiento en procesos, funciones, gestiones, etc.
¿Nos quedamos o renunciamos?
Habiendo rastreado los pros y contras percibidos en el trabajo en la moda peruana, cabe preguntarse también cómo lxs encuestadxs hacen un balance entre beneficios y perjuicios.
Para esto, hay que tener en cuenta, adicionalmente, que más de la mitad de encuestadxs mencionan haberse salido de sus puestos laborales en la moda (54,5%), lo cual ya nos da una pista para reconocer las prioridades de lxs encuestadxs.
Del total de encuestadxs, la gran mayoría (70,5%) considera que hay más problemas que beneficios al trabajar en la moda peruana. Esto quiere decir que aproximadamente 7 de cada 10 personas que trabajan en el rubro, consideran que hay más problemas que beneficios. Definitivamente, es alarmante.
Debido al porcentaje avasallador de este resultado, consideramos pertinente comparar ambas posturas. De acuerdo al análisis de la data, se ha encontrado que hay dos aspectos en el que difieren las dos opciones: las problemáticas percibidas y la continuidad en el trabajo.
Cabe resaltar que categorías como el tipo de empresa en la que se trabaja (siendo las opciones empresas con más de 10 empleados o menos), el área de desempeño, el tiempo que va trabajando o el rango de edad no funcionaron como variables determinantes para entender la diferencia entre aquellos que perciben que existen más prejuicios que beneficios, y aquellos que consideran lo contrario. En ambos grupos se encontró alta variabilidad.
Para efectos de la interpretación, se han asignado los siguientes nombres:
Grupo A: compuesto por lxs encuestadxs que consideran que hay más beneficios que problemas al trabajar de la moda peruana.
Grupo B: compuesto por lxs encuestadxs que consideran que hay más problemas que beneficios al trabajar en la moda peruana.
Se puede observar que para casi la mitad del Grupo A (43,8%), el mayor problema es la baja remuneración. Esto es igual para el Grupo B, pero se adiciona la incoherencia entre el discurso y la práctica de una marca (24,4%), categoría que no había sido relevante en la muestra total, y que se diferencia por aprox. 12 puntos porcentuales del Grupo A (12,5%), a diferencia del resto de categorías que varían entre 0.3 y 6 puntos porcentuales entre ambos casos.
Este hallazgo se puede interpretar en que la principal diferencia entre ambos grupos radica en la percepción en torno a la coherencia de la marca para la que trabajan. Se desprende de este hallazgo, entonces, que para lxs trabajadorxs de moda en Perú es fundamental que la marca para la que trabajan tenga consistencia entre lo que predica para vender y lo que hace a la interna de la empresa. Si la marca es considerada contradictoria (esto quiere decir que dice que hace una cosa, pero hace otra en la práctica), la percepción en torno al resto de problemáticas se asevera, haciendo que los beneficios del trabajo no sean razón suficiente para seguir en el puesto. Por el contrario, si la inconsistencia de la marca no es tan percibida o es inexistente, los beneficios, como la red de contactos y el aprendizaje ganado, cobran un peso más relevante que incluso problemas como la baja remuneración o la explotación.
Un segundo determinante para entender la diferencia entre el Grupo A y B, es la decisión que ambos grupos toman con respecto a su puesto laboral.
El Grupo A, en su mayoría (69%), continúa en sus empleos dentro de la moda peruana debido los beneficios que percibe. Aquellas personas que se han ido de sus puestos (31%), ha sido en su mayoría por temas personales: pandemia, percepción de estancamiento laboral o deseo de nuevas oportunidades.
Por su parte, en el Grupo B, hay una situación inversa, pues el 65% ya no trabaja en sus puestos laborales. Todas las razones (20 respuestas) estaban alineadas a las problemáticas con la empresa/marca, a excepción de dos testimonios en el que la decisión recaía en razones fuera del trabajo: viaje por maestría y poca disponibilidad de tiempo para trabajar.
Aquellas personas que continúan en sus puestos laborales, a pesar de considerar que hay más problemas que beneficios, lo hacen mayormente debido a la excepcionalidad que implica su contrato de trabajo, así como se menciona en el testimonio siguiente:
Esto es lamentable, pues aquello que es percibido como excepcional (y convertirse en razón para poner en segundo plano problemáticas clave) son condiciones que deberían ser la norma. Sin embargo, en un rubro que, como se mencionaba al inicio de esta entrada, es informal y precarizado, los aspectos que deberían ser no negociables por ley se convierten en beneficios inusuales.
En general, consideramos que para ser un primer estudio exploratorio y para tener una muestra aún pequeña, podemos identificar ya algunas problemáticas que saltan a la vista, así como el ambiente general percibido por aquellxs que se encuentran trabajando o trabajaron en la moda peruana. La data mostrada a lo largo de la entrada constata no solo que hay mucho que reformar en el rubro, sino que hay patrones que por años se han reproducido de manera silenciosa e impune, al no estar expuestos de manera objetiva.
En ese sentido, este informe ha tenido el objetivo de visibilizar lo que actualmente está ocurriendo en la moda peruana y el descontento mayoritario que están trayendo estas situaciones.
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Chambear es un término coloquial utilizado en el Perú como sinónimo de la palabra trabajar.